El franco ajusticiamiento en la expresión del poeta limeño Humberto Pinedo Mendoza


AUTOCONFESIÓN
Quisiera tener mil corazones
para recibir sin margen a todos
Quisiera tener mil destinos
para dolerme de sus penurias
Quisiera tener mil conciencias
para corregir sus almas necias
luego huir de un balazo a la sien


VIDA DE OBREROS
Mezquinan alegría soportan desprecio
golpiza rutinada justicia callando
arañado destino familia ofrendan
doblegan peruano cogotean alimento
trabajo honrado prejuician condición
mediocres rajones verdugos perversos


HIJITO DE PAPA
Maldita sea tu pobreza de conciencia
cuando escupes sandeces al vecino
y tu madre callada festeja tu desprecio
Maldito sea tu apellido de corcel
que te alienta para explotar hombres
junto con tus bastardos amigos
Maldito sea tu poder lleno de castigo
que tu padre te regaló para destruir
a las mujeres y niños huérfanos de vida
Maldita sea tu nefasta fortuna de patán
ganada con sudor a hombres sin destino


PARQUE UNIVERSITARIO ¡AY¡
Me revienta soportar de noche a niños torturados de pena
durmiendo de hambre encima de perros malditos de vida
a mujeres tiradas en el suelo llorando su destino turbio
rostros curtidos que pregonan días sin techo y sin cariño
hombres doblados como chanchos unos encima de otros-¡ horror!
trajín de canillas, suertero, mendigos, que la luna los cobija
rameras donando sus cuerpos a los transeúntes ebrios de dolor
negras golpizas de madres abandonadas a su vergüenza
selladas maricas por trágico existir de condición enferman
cuanto desgarro asiento en mi corazón que me desploma rebelde
ante humildes seres hacinados en una sociedad de copetudos



Sobre el autor

Humberto Pinedo Mendoza
Humberto Pinedo Mendoza
Nacido en Lima en 1947, ha publicado los poemarios Topus, Avizor, Convulsión y el libro de historia Rostros y Rastros del Callao.

Agregar un comentario

Su dirección de correo no se hará público. Los campos requeridos están marcados *